Una exhibición, un estreno y un estilo

1.- Jugadorazo.

Tremenda exhibición individual la que brindó Rudy Fernández a los aficionados madridistas en el Palacio, y van unas cuantas esta temporada. El CAI acuciado en su lucha por meterse en el playoffs no fue a pasearse a Madrid y durante dos cuartos dominó la escena. Hasta que explotó Rudy y ya no quedó rastro de los maños. Sus números son estratosféricos (30 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias, 2 robos, ¡40 de valoración! más si tenemos en cuenta que lo hizo en 28 minutos. Está cada día más claro que Rudy parece haber llegado a la plena madurez de su juego. Ese punto de una carrera deportiva donde el físico sigue siendo exultante y el aprendizaje y la experiencia te posibilitan acompañarlo con lecturas adecuadas del juego. Gracias a ellas descubres el santo grial del baloncesto: el cuando y el como. Desde hace ya meses, Rudy no falla casi nunca a la llamada de su equipo cuando se mete en problemas, que resultan mucho más fáciles de solucionar una vez que el alero mallorquín despliega su enorme capacidad de anotar, rebotear, defender, jugar con la máxima intensidad y estar en todos los ajos. Incluso en algunos innecesarios que debería evitar.

– La crónica de Iturriaga

2.- Precioso.

El jueves se inauguró el Gran Canaria Arena, nuevo pabellón del Herbalife. Fui testigo presencial del acontecimiento y he de decir que el pabellón es una pasada. El parquet (es el de los Lakers, se repetía una y otra vez) , las gradas, cómodas, cercanas y con excelente visibilidad desde cualquiera de ellas, y ese impresionante y descomunal marcador, configuran un espacio ideal para jugar a baloncesto. Finalizados los festejos, ahora llega el momento de sacarle todo el jugo posible. El primer reto, que las gradas ofrezcan buenos aspectos todas las jornadas, no sólo cuando llegan los grandes. El domingo, frente al Fuenlabrada, había 9.000 espectadores, una buena noticia. A la espera de cómo evolucionaran los acontecimientos una vez que se pase el subidón, por ahora damos la más cordial enhorabuena al Gran Canaria por el estreno de su nueva casa, mucho más espaciosa y luminosa que el CID y que le tiene que servir para subir un peldaño más de esa escalera que lenta pero sólidamente, ha llevado al Herbalife al privilegiado lugar donde se encuentra en la actualidad, afianzado en la clase alta de nuestro baloncesto.

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3.- Mazazo estático.

En el Palau se vivió un clásico de nuestro baloncesto que en los últimos tiempos anda un poco decolorado. El Barcelona volvió a demostrar que llega muy fino a los momentos cruciales del curso, y el Laboral Kutxa volvió de demostrar que le faltan demasiadas cosas para poder competir con garantías. Mayor consistencia y regularidad y una rotación más profunda y efectiva. Fueron a tirones y así es difícil contener una maquinaria implacable como la azulgrana. Una cosa me llamó la atención. Los azulgranas lograron 91 puntos sin realizar ni un solo contraataque en todo el partido. Todo a base de un ataque estático en el que tuvieron su espacio para lucirse Marcelinho, Tomic, Nachbar, Oleson, etc. No es el estilo que más me gusta, pero hay que reconocer que lo que hacen, lo hacen muy bien. Ya si corriesen un poco más….

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