1. Progresa adecuadamente
Tremenda semana la de Willy Hernángomez, doblando reconocimientos de MVP. Entre semana, 21 puntos y 11 rebotes ante la Virtus de Roma le auparon a mejor jugador de la jornada europea. El sábado, mejoró unos números ya de por sí llamativos y le endosó al Barcelona 29 puntos y 13 rebotes que le llevaron a una fantástica valoración de 43, récord de precocidad. Una vez más se demuestra que a determinadas edades, lo más importante es contar con minutos de juego para poder progresar. Hernangómez sigue bajo la órbita del Real Madrid, pero entre gozar de unos cuantos minutos en una rotación muy exigente y ser hombre clave en otro equipo con menos tronío, ésta es la mejor opción por ahora. Willy va quemando etapas poco a poco, afianzando sus movimientos a la vez que su confianza, y de repetir actuaciones como las de esta semana, su futuro no puede ser otra cosa que espléndido, lo que es una gran noticia para el baloncesto español ahora que en fecha breve, debe producirse un importante cambio generacional.
2.- Un derby como los de antes
La rivalidad entre Estudiantes y Real Madrid atravesaba una época muy gris. Las diferencias entre ambos equipos eran tales que los partidos habían perdido mucho voltaje. El domingo se vivió un choque como los de antes, donde en un ambiente muy cargado, ambos equipos dilucidaban algo más que una victoria. No está fino el Madrid, esto no es nada nuevo, pues se vislumbra casi desde el principio de temporada, pero tampoco Estudiantes emitía buenas señales. El encuentro fue más intenso que bien jugado y Estudiantes supo aguantar hasta ponerse al mando en un territorio donde pudo aguantar el último tirón madridista. Todo un baño de autoestima para los colegiales y más dudas para el Real Madrid, que perdió su imbatibilidad en la Liga Endesa. No se sabe bien si los blancos se lo están tomando con calma o sus traspiés obedecen a razones más profundas. Eso sí, hay una cosa que sigue llamando la atención: su defensa ha pasado de ser expeditiva a convertirse en un coladero donde sus rivales no tienen muchos problemas en irse hasta los 80-90 puntos. Si es cierto que el baloncesto actual se construye desde la defensa, el Madrid tiene un problema muy serio en su arquitectura.
3. Mucha tela
Hubo mucha tela que cortar en la jornada, como el sufrimiento del Unicaja en Murcia para aprovechar el fallo del Madrid y compartir liderazgo, el buen partido del Valencia ante el Laboral Kutxa, necesario para compensar una Euroliga donde cada vez lo tienen más crudo, el triple de Beirán (fue una jornada de hijos de exjugadores) que decidió el duelo entre Iberostar Tenerife y La Bruixa d’Or, la relativa sorpresa, más por el marcador que por la victoria, del triunfo donostiarra ante el Bilbao Basket o el nuevo peldaño subido por el Joventut al ganar a un rival directo en la lucha por la Copa, el Herbalife. Se acercan las navidades, tiempo de mucho baloncesto y todos se afanan por ir llenando la mochila de puntos. Las derrotas al unísono de Madrid y Barça es todo un aviso para navegantes.
